Así reaccionaron después de un encierro lluvioso de varios días: salir al trote, conquistar el Retiro de punta a punta, rebozarse de arena, hacer concurso de abrazos a árboles con papi, un perrito caliente, planes de columpios mojados, carreras y mamporros. Y un segundo de la mano. Vivir, vaya.
2 comentarios:
Te quiero.
Pues... para qué quiero más. Te quiero más.
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