martes, 22 de diciembre de 2009

Euros no, pasteles


"500 millones de pasteles para mííííííííííííí..." (Mato, viendo el sorteo del Gordo de Navidad).

Casa casa casa

Me cojo una semana de vacaciones, con mil planes en la cabeza para salir con los neninos, y me encuentro con nieve lluvia lluvia lluvia lluvia. Así que casa casa casa. Y qué gusto disfrazarnos, hacer aparcamientos para los coches, merendar, cantar, bailar, pitufar, cabrearnos también: "Me enfado de una vez, mamá".


"No entiendes"


Mateo (enseñando a Luc sus zapatillas): "¿Qué te parecen Luc?".
Luc: ...
Mateo: "¿Eh?".
Luc: ...
Mateo: "No entiendes. ¿Por qué no me hablas?".


Dormir con Lem

Habla con él desde que vió en el cine Planet 51. Y Lem, sujetado por el cogote hábil y clandestinamente, le devuelve respuestas y preguntas a las que Mato contesta ya a punto de dormirse. Mato dice que Lem tiene el pelo raro. Y que no tiene nariz. Y es cierto.

Dientinos


"Luc tiene unos poquitos dientes" (Mateo, viendo sonreír a Luc).

Mato Unplugged


"Estaba tocando la guitarra y de pronto abrí los ojos, papá" (Mato, unplugged, justo después de los ensayos con la raqueta que un día fue de la yaya).



lunes, 14 de diciembre de 2009

Columpio

Hay amores que estrujan. Hay columpios que son barcazas y achuchones descompensados y frases sin todas las sílabas y avanzadilla de juegos futuros mientras Jiko y yo miramos. Hay meriendas de nube y pan con quesolomo en La Quesería. Planes y frio polar, sólo por fuera.


Rebobine, por favor

Hace nada, en el breve espacio de 24 horas, descargamos al alimón la cámara digital de Beni, mi suegra, y el móvil de mi Jiko, dispositivos ambos a punto de estallar por el exceso de equipaje desde... casi principios del año. Resultado: un viaje en el tiempo, un rebobine inesperado, un gustito.

(Cuelgo aquí una selección nada breve, lo se, y así, a cascoporro, sin orden ni concierto ni ganas de ordenar porque cada imagen me devuelve momentos que se me habían escapado casi sin darme cuenta. Y me quiero dar cuenta). Ahí va.