martes, 10 de septiembre de 2013

¿Ganas de verano?


¡Muchas ganas! Tantas, que solo con sacar una caja con bañadores se produjo el efecto ambientación playera con equipación sobredimensionada. Bucearon sobre el futón y ni siquiera era Julio.

¡Te voy a dar (Vader)!

Pues se ha convertido en el personaje del verano y en el grito de guerra familiar: ¡Te voy a dar Vader! Qué pasión estelar-guerrera. Qué forma de ver y volver a ver El retorno del Jedi. Qué pasada descubrir a Luke, Han Solo, Leia, Joda y, claro, Darth Vader, de nuevo, a través de sus ojos, abiertos con destellos láser galácticos.

Cuestión de ritmo

Ya no puedo elegirles la ropa. Ellos deciden estilismo y, por supuesto, el paso a seguir. Si tienes prisa, ellos ralentizan, parándose en cualquier escaparate. Si por el contrario tienes calma, ellos aceleran, como si la vida fuera una carrera a ritmo de rap.


Exploradores

No se cómo será cuando un día nos cambiemos de casa. Pero ahora, su cuarto es un fuerte y un refugio y lo exploran hasta los confines de la isla del tesoro y el barco pirata y piezas diminutas del Lego que ellos siempre encuentra debajo de la cama o el sillón. Cosa fina es cuando barren las fronteras del armario y el suelo se esconde bajo trapos que ellos convierten en disfraces raros. Qué gusto cuando se oyen diálogos en diagonal y risas sueltas. Qué mosqueo cuando solo se oye silencio: suele esconder un plan siniestro...

Goonies en el Retiro

Cita en el Retiro con Teo y Blas y Lola. Hicieron expediciones y a veces se perdían de vista. Y volvían cubiertos de hojas y polvo del desierto que es la arena de ciudad. Como si fueran los Goonies.




Piano piano

A cuatro manos, notas superpuestas, mucho ruido y el simple placer de hacerse pasar por músicos de verdad, esas manitas sobre blanco y negro.

lunes, 9 de septiembre de 2013

Mañanas lentas

En vacaciones mantenemos la templanza. Cuerpitos despertándose a cámara lenta, enroscados y lentos. Un gusto.

Mormirse

En nuestra familia se duerme a pares. Padre-hijo-dominó.

Lego

A falta de hoguera, lamparita. El efecto es el mismo: intimidad con lego entre manos. Naves, coches, mundos enteros piecita a piecita.

Momentos de huerto

El huerto nos da momentazos. Como estos. Partidillos improvisados de fútbol, carreras de expedición, padel entre comillas y unos atardeceres de órdago.


Graduación

¿Cómo que una graduación? ¿Con 5 años? ¿Estáis de coña? Eso dije cuando empecé a enterarme en los corrillos del cole del "evento". Y sí. Graduación. De Infantil a Primaria. Birrete de manualidad, diploma y orla, y una fiesta que, contra todo pronóstico, resultó cachonda. Los chicos se marcaron un rap y vimos pasar el tiempo casi con lagrimita, a través de galería de fotos presente-pasado. Luc se puso pardo en la merendola, sabiendo lo que le espera.






Globos hacia el infinito

Dos globos y una puerta-escenario en mitad de la calle. Los globos, como si fueran cohetes. Impulsados hacia adelante, hacia los lados, hacia el infinito.



Todo nubes



Campo de fútbol para ellos solos. Luc chuta con capucha y con Ignacio. Todo nubes, por encima. Y alma de pichichi.